Si a la obra de Shakespeare unimos el genio musical de Adès y la imaginación de Robert le Page ........solo cabe la excelencia.
Próspero, antiguo Duque de Milán cuyo trono ha sido usurpado por su hermano Antonio, se ve obligado a vivir recluido en una isla. A lo largo de la obra Miranda, la hija de Próspero se enamora de Fernando, hijo del Rey de Nápoles y cómplice de Antonio.
La obra arranca con una tormenta en alta mar.Música disonante y estallidos instrumentales. Cuando amaina, nos encontramos con Miranda, hija de Próspero rodeada de náufragos. Ella piensa que su iracundo padre es el responsable. Cada frase vocal se convierte en masa coral. Este es solo uno de los recursos de Adès a lo largo de la obra.
Que decir de las voces....... la fuerza del barítono Simon Keenlyside, la de soprano ligera de Ariel y el tenor lírico de Caliban hace que el conjunto supere cualquier expectativa.
La pericia de Robert le Page, antiguo director de Le Cirque du Soleil y polémico responsable de la puesta en escena de El Anillo de Wagner, hace que los personajes reales y surrealistas, espíritus e ilusiones encajen formando un todo.
Y todo ello en esta filmación que nos trae nuestra socia, María Testa a la Virginia.
Gracias María.
Estamos ante una obra maestra tanto en libreto como a nivel estético musical.
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