La Asociación de
Mujeres de Marbella ha disfrutado de la Feria de San Bernabé de Marbella con un
paseo por el Recinto de Día, una visita al Punto Morado y un almuerzo en
nuestra casa, El Restaurante del Hotel San Cristóbal que nos trata como de la
familia.
Ataviadas con trajes de faralaes, flores,
zarcillos grandes y coloridos pasearon la feria las Mujeres Universitarias,
bueno, parte de ellas, porque ya somos más de cien. A medida que las
obligaciones laborales permitieron, muchas más se unieron al grupo en el
almuerzo.
Como es propio de nuestra implicación
social por una sociedad más justa y de derechos para todos sus miembros, se
realizó una visita al Punto Morado, una iniciativa de la Delegación de Igualdad
y Diversidad para acercar la seguridad en materia de abusos sexuales de los que
como sabemos, las mujeres de todos los tiempos tenemos doctorados y cátedras.
Los agentes de la policía destacados en este punto de disuasión, información,
refugio y denuncia quisieron hacerse fotografías con las socias, no en vano ya
somos un referente, lo que hoy se conoce por influencers, en nuestro caso por
nuestra trayectoria comprometida con la formación de las mujeres con el
objetivo de que tengan el poder intelectual para impedir injusticias y estar en
todos los ámbitos de la sociedad para la que somos un efectivo tan importante.
Una vez todas reunidas, la presidenta Garbiñe
Larrazábal tomó la palabra para felicitar a todas, agradecer a la Familia Parra
y tomar por los cuernos el tema del que no queríamos ni hablar, y es que
Garbiñe deja la presidencia. Esta pérdida es tan dolorosa para mí que sólo tuvo
analgesia al saber que por fin tenemos candidatas a la próxima junta directiva.
Y desde el agradecimiento, el respeto, la admiración más absoluta a una mujer justa,
emprendedora, solidaria y de carácter como es mi amiga Garbiñe Larrazábal, no
puedo más que ponerme a disposición de la próxima dirección porque si no se
presenta otra candidatura, tendremos una presidenta trabajadora como pocas,
minuciosa, con el respaldo de todas las socias, con unas ganas y capacidad para
aprender que garantiza la acción de AMUM en nuestra municipalidad.
Posteriormente, tomamos un almuerzo exquisito,
propio de Maxim’s, donde es justo resaltar el bacalao confitado en lecho de
tabulé y techo de cebolla confitada, una delicia que como siempre cada una se
pagó, eso sí, con el precio y el trato espectacular que la familia Parra nos da.
Una vez apagada la sed gastronómica la
tertulia más diversa se alargó hasta entrada la noche, San Bernabé nos dio fuerzas.
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